Temperatura: debe mantenerse por encima de 15 ºC y el crecimiento se hace más rápido conforme ésta aumenta. Valores inferiores a los 10 ºC aumentan la susceptibilidad a enfermedades y provocan la pérdida de hojas.
Luz: juega un importante papel en la variegación y debe mantenerse entre 15.000 y 25.000 lux, ya que por debajo el color predominante es el verde.
Sustrato: cualquiera que presente buena aireación y que esté neutralizado.
Riego:se darán riegos moderados en verano y escasos en invierno. Se deben evitar los encharcamientos.
Fertilización: en fertirrigación va bien un abonado equilibrado tipo 2:1:3 a razón de 150 ppm (Jiménez y Caballero, 1990). También es recomendable la aplicación de abonos foliares que contengan calcio, con el fin de mejorar la variegación.
Lo he visto, y la verdad esque lo veo todos los dias pero nunca habia dejado un comentario…